El pasado mes de abril entró en vigor la modificación del Reglamento 1811/2006 de la Unión Europea que establece el contenido máximo de mercurio en el pescado, un tema especialmente sensible para los asociados de Interfish los cuales capturan, transforman y comercializan grandes peces, como es el caso de la tintorera.
La norma no implica ningún cambio sustancial para túnidos y especies de palangre (tiburones, espada, etc) para los cuales se mantiene la recomendación de Bruselas en 1,0 mg/kg, aunque sí las hay para otras especies de pescado, cefalópodos y crustáceos, para las que la Comisión afina, a la baja, su recomendación de consumo.
La Comisión está dispuesta a seguir actualizando las recomendaciones relacionadas con la presencia de mercurio en productos del mar, sobre todo en lo referido a especies como el tiburón y el espada, una demanda que viene planteando el sector desde hace años. Sin embargo acaba de adoptar una recomendación por la que pide a los Estados miembro que trabajen para recopilar nuevos datos con el fin de conocer mejor el impacto “real” que tendría la reducción de los niveles máximos autorizados. Para ello establece una hoja de ruta hasta 2025, cuatro años en los que los Estados Miembros (EM) tendrán que monitorizar la presencia de metilmercurio y mercurio total en especies de pescado, crustáceos y moluscos, tanto de captura salvaje como de acuicultura.
Desde Interfish somos conscientes de que no existen nuevos datos que hagan variar las recomendaciones ya hechas en 2019 por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) para los consumidores españoles. Con todo, y a la espera de que AESAN convoque al sector, la flota muestra su disposición a colaborar.